La importancia del vínculo para sanar II

Lo que no se dice, tiene más peso que lo evidente

No hace mucho que se ha empezado a  reconocer la importancia del vínculo en psicología

Así el método y las diversas técnicas que utilizamos están supeditados al vínculo y sus características.   Y a veces hacemos cosas que antes se podrían calificar como poco ortodoxas, porque no se comprendía que solo la aplicación de la técnica es muy limitada. 

¿Por qué en un proceso terapéutico el vínculo es esencial?

Porque da la posibilidad a la persona de experimentar una forma de relacionarse diferente a la que ha experimentado.  Y de esta manera es que podrá sanar.   Ya que nuestros conflictos más profundos  se han originado en el vínculo con nuestros padres o cuidadores durante la infancia, lo que generó un apego[1].

Si hemos vivido un vínculo no sano con nuestros cuidadores  -y esto sucede en un porcentaje muy alto de la población- hemos adquirido lo que llamamos un patrón de apego no seguro a través del cual nos relacionamos con ellos y el que iremos reproduciendo con todas las demás personas a lo largo de nuestra vida. 

En próximos artículos hablaremos del apego no seguro y como nos afecta a la hora de relacionarnos con los demás.

 

[1] El apego, es una vinculación afectiva intensa y duradera que se desarrolla y consolida entre dos individuos, por medio de sus interacciones recíprocas.  El fin del apego es el sentirse acompañados y protegidos en momentos de amenaza.
El primer psicólogo en desarrollar una «Teoría del apego» fue John Bowlby.

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