El Análisis Bioenergético es un método de Psicoterapia que trata a la persona en su totalidad. Atendiendo a sus dimensiones corporal, emocional, mental y relacional.
Combina el trabajo corporal y el verbal: El plus de este método psicoterapéutico, es la incorporación de un trabajo psico-corporal. El que permite vivir una experiencia distinta a los patrones habituales. Dichas vivencias van generando nuevas sinapsis que irán modificando hábitos en la vida cotidiana de forma natural.
Uno de sus postulados fundamentales: es que todos nosotros tuvimos que desarrollar un sistema de defensa mientras crecíamos, a fin de sobrellevar las situaciones dolorosas a las que tuvimos que hacer frente en la infancia y adolescencia. La mayor parte de dicho sistema de defensa actúa desde nuestro inconsciente, es la forma particular que cada uno hemos encontrado de seguir adelante de la mejor manera posible con el mínimo daño a nuestra persona.
Funciona como una coraza protectora. Este sistema defensivo no solo está estructurado en nuestra psique, en forma de mecanismos de defensa, sino que está también reflejado en nuestro cuerpo, en lo que se llama tensiones crónicas, -a nivel muscular, de órganos y tejidos-, que limitan nuestra vitalidad, nuestra movilidad, así como nuestra capacidad expresiva. Todo ello es lo que conforma la estructura de carácter, es decir, aquella máscara de personalidad con la cual nos hemos identificado para sobrevivir.
El problema es que cuando crecemos, y ya no necesitamos esta función protectora de la coraza, ésta sigue instalada, cumpliendo su función defensiva y gastando una energía innecesariamente. Ello condiciona y restringe nuestra libertad, siendo fuente de conflictos y padecimientos. Además genera confusión porque llegamos a autoconvencernos que eso es lo que somos. Para liberarnos de ella es necesario realizar un proceso terapéutico integral: que abarque no solo la esfera mental sino también lo corporal.
A quien va dirigido
A toda persona que sienta que necesita hacer un proceso psicoterapéutico para resolver conflictos internos que no le dejan llevar una vida satisfactoria.
Objetivo
El objetivo básico del Análisis Bioenergético es restaurar la salud integral, incrementando la vitalidad, la expresividad y la capacidad para disfrutar la vida.
Metodología
Se utiliza el trabajo corporal, así como la terapia verbal analítica, para ayudar a las personas a:
• Sentir y reconocer las tensiones crónicas en el cuerpo y darse cuenta de cómo éstas le limitan. Para luego poco a poco ir liberándolas.
• Alcanzar una comprensión más profunda acerca de cómo lo que siente en su propio cuerpo se relaciona con sus actitudes en la vida y con su historia personal.
• Restaurar la expresión auténtica relajando las tensiones corporales que conforman lo que llamamos la coraza corporal y la estructura de carácter. Esto permitirá mayor libertad de elección en la propia vida.
Paulatinamente irá procesando e integrando experiencias durante las sesiones, lo que le permitirá gradualmente desarrollar diferentes y creativas respuestas a los desafíos de su vida.
Frecuencia y duración
Sesiones de una hora una vez por semana. No hay una duración predeterminada, ésta depende del motivo de consulta y de como la persona va asimilando su proceso y de los objetivos que quiera alcanzar.
Acerca de su origen
«Si no sientes tu cuerpo solo eres espíritu. Si ese espíritu encantado está vagando por ahí ¡no tiene a donde ir! ¡No sabe quien es!. Si traes ese espíritu otra vez al cuerpo, el cuerpo se vuelve más vivo y el espíritu se realiza más plenamente« Alexander Lowen
El Dr. Alexander Lowen fue quien desarrolló este enfoque psicoterapéutico alrededor de 1950. Él continuó y amplió el trabajo de Wilhem Reich, su terapeuta y mentor y en su tiempo discípulo de Freud. Reich había diseñado un tipo de terapia revolucionaria para la época. En ella incluía el trabajo con el cuerpo y la circulación de su energía vital.
Lowen ideó el concepto de “enraizamiento”, diseñó varios ejercicios para suavizar las tensiones musculares y permitir una expresión emocional completa. Creía, como su mentor, que una intervención terapéutica holística debía incluir el cuerpo. Puesto que lo consideraba una puerta de entrada a las capas profundas de la psique. Así como una herramienta principal en la resolución de los conflictos inconscientes.
Conceptos importantes
• El enraizamiento o Grounding
El enraizamiento, es la capacidad de sentir la conexión con el suelo. Lo que hace que estemos en contacto con la realidad. Comúnmente le llamamos “tener los pies en la tierra” o “estar bien plantado”. A menudo, nuestra conexión con la tierra es precaria.
El análisis bioenergético trabaja para ayudarnos a recuperar nuestro centro de gravedad. Ello restituye el equilibrio y la confianza. Nos da una perspectiva realista y nos motiva aprovechar nuestros recursos para hacer frente a los retos de la vida.
• La Respiración
Cuando es natural y profunda nos permite energizarnos y estar equilibrados/as y relajados/as. En general, nuestra respiración está limitada debido a las tensiones musculares crónicas que se estructuraron en nuestro cuerpo mientras crecíamos.
El análisis bioenergético dedica mucha atención a la función respiratoria. Trabaja para restaurar esta función natural a fin de ayudar a la persona a reconectarse y expresar las emociones reprimidas. Las que, le pueden haber llevado, originariamente, a contraer algunas partes de su cuerpo, con el fin de mantenerlas sujetas.
• El vínculo
Nuestros conflictos internos se han originado en los vínculos con los demás. Fundamentalmente en el periodo más temprano de la vida donde éramos dependientes de los adultos. Las primeras relaciones, con nuestra familia, son las que marcan el tipo vínculo que estableceremos con el resto de personas.
En el proceso terapéutico el vínculo que se genera con el terapeuta es fundamental para la resolución de dichos conflictos.
Dicho vínculo paciente-terapeuta, tiene unas características especiales y cumple una función sustancial. Hace que la persona se sienta acompañada y comprendida en este camino, dándole mucha fuerza para enfrentarse a sus dificultades.
Cuando recibe una respuesta reparadora, sensible, estable y afectuosa, sentirá seguridad y podrá reparar los aspectos dañados a nivel vincular, porque lo que se resuelve en la relación con el terapeuta, luego se traslada a otras relaciones.